El pasado 15 de Junio Manu,Mª Jose, Jonathan y el que escribe (Pepe), decidimos ir a la vecina Asturias para hacer el río Purón, es una “cueva-barranco” que se encuentra en el limítrofe concejo de Llanes.

 Quedamos a las diez de la mañana en el camping Purónque se encuentra antes del desvío de la carretera que también da nombre al pueblo. Por la estrecha carretera nos dirigimos hacia el comienzo de la pista que nos llevaría hasta la campera donde comienza el descenso. En la entrada de dicha pista procedimos a preparar todo el equipo para hacer el cambio de coche y dejar otro abajo para la vuelta.

 Estando ya en dicha campera procedimos a colocarnos el equipo con ganas de meternos en el rio ya que el calor apretaba, nos dirigimos a la entrada donde pudimos observar que no llevaba mucho caudal, al poco de entrar tuvimos que solventar algún problemilla de un frontal, cosa que no nos llevó mucho tiempo, así pudimos observar alguna pequeña formación y depósitos de ramas a una altura superior de medio metro más o menos que debían ser sin duda del invierno.

 Llegamos al primer rápel de la cueva de aproximadamente 9 metros que superamos sin problemas, después llegamos a una sucesión de marmitas donde Mª José pudo comprobar por que reciben el nombre de marmitas trampa, así seguimos hacia el segundo rápel que es una rampa de 30 metros que está fragmentada y donde unos metros antes el río cambió de curso. Allí en la cabecera pudimos observar restos antiguos de una instalación que se encuentran a una altura considerable. Haciendo la segunda parte de este rápel ya se puede apreciar la claridad de la salida, una vez terminado este rápel solo queda un pequeño des trepe hasta la salida y comienzo del barranco que queda al aire libre que consta de tres rápeles en una bonita zona llena de vegetación, a la que sigue otra zona también muy bella en la que el río se vuelve a encañonar, la cual es muy resbaladiza. Y así llegamos al puente que marca el final del descenso.

  Como era muy tarde y no habíamos comido, nos dirigimos a la playa de la franca para hacer una merecida merienda.