Exploración
TERCER ASALTO A LA PUNTA DEL CORZO
Cabe destacar que en una mañana fresca como era la de este día el aire en todos los pasos estrechos se notaba aspirante y después entorno a las 12:30 13:00 del mediodía, coincidiendo con el cambio de temperatura en ascenso del exterior se torno a soplador.En cuanto a las labores de trabajo………..más de lo mismo, seguimos desobstruyendo y avanzando por un meandro estrecho de curvas muy pronunciadas y que “parecen” ir separándose entre ellas muy poco a poco, haciendo así algo más rápida la labor. De convertirse este punto en un acceso a algo, su nombre sería claramente el “paso del Onanismo”. A las 5:30 comenzamos el ascenso y tras las dos horas de doblar la bisagra de rigor los quince en la calle, digo "Quince" porque Chus rescató cerca de 10 o 12 batracios, entre sapos y salamandras del fondo del primer pozo. Las sensaciones son buenas y esperamos que el meandro se empiece abrir lo suficiente para dejarnos avanzar sin tener que desobstruir, pero esto será otro día. |
SEGUNDO ASALTO
Esta será la segunda entrada la Torca del Corzo para seguir con la desobstrucción; entramos a las 10:15 y hemos avanzado unos tres metros; se consigue trabajar erguido y tenemos que montar un polipasto para poder sacar bloques debido a su tamaño. Son curvas de meandro pronunciadas, concrecionadas y ennegrecidas por la corriente de aire pero su anchura no me permite meter la cámara para grabar en condiciones. Hace muchísimo frío se nos quedan las manos heladas y seguimos escuchando por una parte le ruido del aire y un eco. Ha sido un día duro de trabajo pero productivo. Conclusión: Hay que seguir desobstruyendo Salida a las 21:30 COLABORANDO CON KARSTEXPLO
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COMIENZA LA OBRA
A pesar de que no llueve, la temperatura es fresca por lo que no hay apenas contraste ni corriente de aire fuerte, solo se hacía más notable en los pasos más estrechos; el agua caída hace que la torca esta mojada a partir del P 8, Llegamos empapados a punta pero al no hacer demasiada corriente se podía estar más o menos bien. El objetivo era forzar el paso en el meandro; era cierto que no cabía ni la mano pero la corriente de aire era heladora. Nos pusimos con las pajitas con la técnica ya completamente depurada lo que permitió el rápido avance, con esto y con la siempre socorrida maceta española comienza una larga desobstrucción, pero esperanzadora porque en relativamente poco tiempo se puede trabajar más cómodo; no se puede hacer punto caliente puesto que toda la base del pozo esta mojada excepto donde se está trabajando. No miramos las ventanas ya que se nos olvido la broca de 6mm. Comenzamos el ascenso sobre las 17:30, de nuevo esta tortura de ascenso al exterior al que ya le estamos cogiendo hasta cariño, a las 19:00 todos fuera CONCLUSIÓN: HABRÁ QUE INTENTARLO
Esta entrada está encaminada a revisar la punta de la torca donde la vez anterior llegó solamente Iván y las posibles ventanas del último P50. De esta manera opinaremos más gente para tomar una decisión al respecto, pues de seguir trabajando en ella la desobstrucción que nos espera se antoja un tanto larga y costosa, pero la verdad es que esa corriente de aire nos hace mirarnos una y otra vez entre nosotros y hacernos la misma pregunta, ¿Pero? ¿Vamos a dejar esto aquí? Entramos pronto y con el material justo para reinstalar el último pozo, los tortuosos pasos se van sucediendo uno detrás de otro y en aproximadamente una hora ya nos encontramos los tres en la cabecera del P50, comienza David con la instalación y le seguimos observando si se nos ofrecía alguna otra posibilidad. Al llegar a la base del mismo no podíamos creer el ruido y la cantidad de aire que salía por esa especie de meandro dibujado en el suelo por el que tan solo nos cabe la mano en el mejor de los casos. El aire llega a mover la cuerda que acabamos de instalar y que se encuentra a unos tres metros de nosotros, incluso en ocasiones nos quedamos callados durante un buen rato para poder escuchar atentamente, llegamos a pensar que podía tratarse de agua y que podía haber un rio del otro lado o ¡una cascada! Inevitablemente nos estábamos viniendo arriba por momentos así que decidimos ir saliendo poco a poco, revisar las ventanas pendientes y topografiar hasta el punto donde se dejo la anterior entrada. Logramos salir antes de que Ana que llegaba de trabajar e iba a unirse con nosotros empezase a descender la torca. De esta manera, pronto por la tarde y con una sensación de no saber cuál es la decisión más acertada acabamos la jornada. Hora solo toca tomar una determinación. |